El canciller explicó que no daría a conocer la estrategia porque pondría a México en una posición desventajosa. También explicó que EU quería que fuéramos tercer país seguro, lo que implicaba aprobación del Congreso.
El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard Casaubon, puntualizó que durante las mesas de negociación con autoridades de Estados Unidos, el país vecino presentó una propuesta para que México se convirtiera en “tercer país seguro”, lo cual se pretendía fuera aprobado para su “firma inmediata”. Los estadunidenses se mostraron escépticos a los planteamientos mexicanos y, empero, se logró llevar los acuerdos lejos de la propuesta inicial de Trump.
La delegación mexicana respondió al planteamiento de tercer país seguro que no estaba interesado en contemplar dicha figura, al tiempo de precisar que ello implicaría la aprobación del Senado de la República. De lo expuesto ayer por Ebrard, se desprende que en el caso más extremo, México buscaría convencer a EU de crear un esquema continental de atención a asilados en el que un solicitante que no tenga cabida en Norteamérica puede terminar en Chile si hay condiciones de vida para él allá.
Ebrard destacó la participación de la embajadora Martha Bárcenas, quien se encargó de rechazar los alegatos de Mike Pompeo que auguraba el éxito de un esquema de tercer país seguro (en el que México recibe a todo aquel solicitante de asilo rechazado en EU y también acoge a los que están en proceso de trámite); Pompeo puso como ejemplo a Turquía-Unión Europea. Bárcenas fue nuestra embajadora en Turquía, por lo que pudo establecer en la mesa que había claras diferencias entre los casos que Pompeo quería igualar.
En conferencia de prensa, Marcelo Ebrard dio a conocer también detalles de las mesas de negociación que se dieron la semana pasada. Ebrard puntualizó que la Guardia Nacional comenzó a ser desplegada este mismo día (ayer martes), en la frontera sur del país.
Sostuvo que el tema migratorio se aceptó porque ha crecido el flujo irregular, en los últimos años, de personas procedentes de Guatemala, Honduras y El Salvador, sin embargo, una figura de tercer país seguro, tendría que ser aprobada por la Cámara alta, y a cambio se planteó la posibilidad de contar con una iniciativa regional “en la que participen todos los países involucrados en el flujo migratorio, y desde luego, Estados Unidos”.
En una lectura inicial, el canciller dio cuenta detalle a detalle de todos los días de las negociaciones.
En este contexto, Ebrard sostuvo que México se mantuvo firme en las negociaciones, logrando que no se aplicaran los aranceles.
Asimismo, externó su plena confianza en que habrá resultados al término del plazo establecido, y en eventual caso de que no pudiera ser así, México tiene planteada una segunda propuesta, aunque aseveró, no la revelaría, “porque sería colocar a México en una posición de desventaja”.
Aseveró que todo lo que sucedió en las negociaciones, se encontraba contenido en el documento que acababa de leer, y que no había ocurrido nada más que no estuviera contenido en dicho texto, porque en el eventual caso de que México fracasara en su objetivo durante los próximos 45 días, “el Senado de la República debe estar enterado de todo lo que ocurrió”.
